La bechamel de calabaza es una deliciosa salsa que añade un toque cremoso y sabroso a cualquier plato. En esta ocasión, te presentamos una receta para elaborar unos macarrones gratinados con esta maravillosa salsa. La combinación de la calabaza cocida con la cebolla, la leche de soja y los condimentos, crea un plato realmente irresistible. Además, si eres vegano, encontrarás en esta receta una alternativa deliciosa y saludable. Así que prepárate para disfrutar de una comida reconfortante y llena de sabor con estos macarrones gratinados con bechamel de calabaza.
Ingredientes necesarios
- 300g de macarrones
- 300g de calabaza cocida y aplastada
- 1 cebolla grande, picada
- 500ml de leche de soja
- 50g de harina de trigo
- 50ml de aceite de oliva
- Una pizca de nuez moscada
- Una pizca de pimienta negra
- Sal al gusto
- Quesos veganos opcionales para gratinar: Blue Style de Sheese y Parmesano de Violife
Preparación paso a paso
Paso 1: Cocinar los macarrones
Comienza por cocinar los macarrones según las instrucciones del paquete. Asegúrate de que estén al dente para que no se sobrecuezan al hornearlos posteriormente. Escúrrelos y resérvalos.
Paso 2: Preparar la bechamel de calabaza
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Agrega la cebolla picada y cocínala hasta que esté dorada.
A continuación, añade la harina de trigo y remueve constantemente durante uno o dos minutos para cocinarla.
Vierte la leche de soja poco a poco, mezclando constantemente para evitar que se formen grumos. Continúa removiendo hasta que la mezcla se espese y adquiera una consistencia similar a una salsa.
Agrega la calabaza cocida y aplastada a la bechamel. Mezcla bien para combinar todos los ingredientes.
Añade la nuez moscada, la pimienta negra y la sal al gusto. Prueba la bechamel y ajusta los condimentos según tus preferencias.
Cocina la bechamel de calabaza a fuego lento durante unos 10 minutos para que los sabores se fusionen y se espese aún más.
Paso 3: Mezclar los macarrones y la bechamel
En un recipiente grande, mezcla los macarrones cocidos con la bechamel de calabaza. Asegúrate de cubrir bien los macarrones con la salsa para que cada bocado esté lleno de sabor.
Paso 4: Gratinar los macarrones
Si deseas darles un toque gratinado, puedes añadir queso vegano por encima de los macarrones. Utiliza los quesos Blue Style de Sheese y Parmesano de Violife para obtener un sabor aún más rico.
Coloca los macarrones en una bandeja para horno y espolvorea generosamente los quesos veganos por encima.
Introduce la bandeja en el horno precalentado a 180 grados Celsius y hornea durante 15-20 minutos, o hasta que el queso esté gratinado y burbujeante.
Paso 5: Servir y disfrutar
Una vez que los macarrones gratinados estén listos, sácalos del horno y déjalos reposar durante unos minutos antes de servir. Esto permitirá que los sabores se asienten y los macarrones se enfríen un poco.
Sirve los macarrones gratinados con bechamel de calabaza en platos individuales y acompáñalos con una ensalada ligera de hojas verdes frescas y otros vegetales de temporada. La combinación de la pasta cremosa y la frescura de la ensalada será simplemente irresistible.
Consejos útiles para su elaboración
- Puedes utilizar cualquier tipo de macarrones que prefieras: cortos, largos, rizados, etc. La elección dependerá de tus gustos personales.
- Si no eres vegano, puedes optar por utilizar leche de vaca en lugar de leche de soja.
- Si deseas añadir un toque de sabor extra a la bechamel de calabaza, puedes agregar hierbas frescas como perejil, albahaca o cilantro.
- Si no tienes una batidora de mano, puedes utilizar una batidora de vaso para triturar la calabaza cocida y obtener una textura suave y cremosa.
- Para gratinar los macarrones, asegúrate de que el queso vegano esté bien repartido por toda la superficie de la bandeja. De esta manera, cada bocado estará lleno de sabor.
- Si prefieres una versión más ligera de esta receta, puedes omitir el paso de gratinar los macarrones y simplemente servirlos con la bechamel de calabaza. Aunque perderás el toque crujiente y dorado del queso gratinado, seguirás disfrutando de un plato rico y sabroso.
Opciones de presentación y acompañamiento
Los macarrones gratinados con bechamel de calabaza son un plato completo y delicioso por sí solos, pero también puedes acompañarlos con otros alimentos para crear una comida aún más completa.
Una opción de presentación y acompañamiento podría ser servir los macarrones en pequeñas cazuelas individuales, decoradas con unas hojas de perejil fresco y acompañadas de una ensalada de rúcula y tomates cherry. La mezcla de los sabores de la pasta cremosa, la frescura de la ensalada y el toque picante de la rúcula, resultará en una combinación irresistible para cualquier amante de la comida.
Otra opción podría ser servir los macarrones gratinados en platos llanos, con rodajas de aguacate fresco y hojas de albahaca como decoración. Acompáñalos con una ensalada de espinacas frescas, nueces y aderezo de vinagreta balsámica para obtener una comida equilibrada y llena de nutrientes.
Recuerda que la presentación de un plato es tan importante como su sabor. Así que toma tu tiempo para crear una estética visualmente atractiva y apetitosa antes de saborear cada bocado de estos deliciosos macarrones gratinados con bechamel de calabaza.
Conclusión
Los macarrones gratinados con bechamel de calabaza son una opción deliciosa y saludable para disfrutar de una comida reconfortante. La combinación de la calabaza cocida, la cebolla, la leche de soja y los condimentos, crea una salsa cremosa y llena de sabor que envuelve cada macarrón. Puedes añadir queso vegano por encima para darle un toque gratinado aún más delicioso. Sirve los macarrones gratinados con una ensalada fresca para equilibrar los sabores y disfrutar al máximo de este plato. ¡No esperes más y prueba esta receta de macarrones gratinados con bechamel de calabaza hoy mismo!